Ayer pudimos ver a toda la familia Beckham al completo en el estreno de la prémiere de su documental de Netflix en Londres. Es que no faltaba ni uno, David y Victoria Beckham, Brooklyn, Romeo, Cruz y Harper Beckham. Tampoco las parejas de Broolyn Beckham, Nicola Peltz y la de Romeo Beckham, Mia Regan.
Estilosos, guapos, bien avenidos, el vivo ejemplo de estampa familiar amorosa y envidiable. Todo bien, que nos encantan todos. Pero fijándonos, ojo que esta foto lleva truco. Y no uno cualquiera, NO. Es el más viejo del mundo, al menos en España.
Esto se ha hecho toda la vida en las bodas españolas. Foto de familia y alguien organizando, generalmente las madres. Por lo menos la mía. Todo sin más mientras la foto de familia sea sólo de padres e hijos. La cosa cambia el mismo momento en que llegan las parejas de los hijos. Entonces toca hacer uso de este viejo truco ancestral que ahora han emulado los Beckham. Que no es otro que hacer una gran gran foto de familia en la que el centro de la foto lo ocupen los padres e hijos, y en los extremos las parejas de los hijos.
Ya sabes a qué me refiero, porque hasta los propios fotógrafos de las agencias lo han hecho al publicar sus instantáneas. La familia es irrompible, las parejas pueden romperse. Pues entonces, el truco es evidente, poner a las parejas de los hijos en los extremos, por si llegado el momento, hay que cortar esa foto.
¿Enrevesado? Puede. Eficaz, mucho. Porque a ver que todos sabemos que los Beckham quieren muchísimo a sus nueras, pero la vida es muy larga, y las parejas a veces rompen (no lo quiere nadie, vaya por delante).
A todos nos han puesto alguna vez en el extremo en alguna foto. Es ley de vida y de recuerdo.
Así que sí, los Beckham aplican este viejo truco español, ¿Lo aprenderían durante los años de residencia en Madrid?
La foto familiar de los Beckham
La foto cortada de los Beckham
Paula Llanos es Jefa de moda en ELLE.es. Licenciada en Periodismo en la Universidad Pontificia de Salamanca, con experiencia en prensa escrita, radio y televisión pero con total vocación digital. Desde el año 2000 (18 años) en internet, en prensa femenina 13 años y 10 años en Elle.es Adicta a la moda, las compras e Instagram. Experta en crear necesidades e identificar prendas y accesorios con una sola foto y en hacer titulares con juegos de palabras.
