La primavera es tiempo de renacimiento y nuevos comienzos en la que el paisaje y la belleza florecen. Para dar la bienvenida a la nueva estación y a su colección Primavera-Verano 2025, Marina Rinaldi ha elegido el sur de Francia como escenario de un exclusivo recorrido que aúna moda y autenticidad junto a cuatro talentos excepcionales en un viaje multisensorial a través de los sabores, aromas y colores de la Provenza. Durante más de cuarenta años, la casa de moda emiliana ha ensalzado las curvas femeninas con prendas elegantes y versátiles, permitiéndonos a todas expresar nuestra singularidad a través de un estilo personal. Ese carácter distintivo florece ahora en una nueva colección totalmente inspirada en el encanto francés y en la ligereza de la Riviera Francesa.
Gabriela Giovanardi, Callie Thorpe, Andrea Boutin y Rola Blades pasaron tres días en el corazón de la Provenza, inmersas en su naturaleza, historia y especialidades culinarias, disfrutando de experiencias personalizadas y compartiendo auténticos momentos de descubrimiento y creatividad. Su estancia en el exclusivo Domaine Jolibois comenzó con una degustación del aceite de oliva de la finca y una cena privada con un menú provenzal diseñado con mimo por una chef. El segundo día, se organizó una visita para explorar las bellezas culturales de Aix-en-Provence, entre edificios históricos, monumentos y hôtels particuliers. El viaje culminó en la Boutique Rose et Marious, donde se sumergieron en el universo de la alta perfumería francesa y crearon fragancias personalizadas que reflejan sus personalidades únicas. El último día, en un homenaje a la primavera, se reunieron en un taller floral donde cada una compuso su propio ramo, expresando su creatividad y su visión del mundo. En cada actividad, nuestras protagonistas lucieron atuendos impecables que reflejan sus caracteres, todos ellos de las colecciones de Marina Rinaldi. Inspirándonos en su viaje, hemos decidido hablarte de cada uno de sus estilos a través de un cuaderno de viaje hecho con postales vintage. ¿En quién te ves más reflejada?
Gabriela Giovanardi: estandarte del minimal-chic italiano
Nacida en Milán en 1992, la actriz y modelo Gabriela Giovanardi ha sido imagen de campañas de marcas de prestigio y ha trabajado con fotógrafos de fama internacional. En Instagram, promueve la cultura y la artesanía italianas, destacando por su especial atención a la calidad de los tejidos y su estilo minimal-chic lleno de contrastes, gusto exquisito y prendas extravagantes, siempre con la mirada puesta en la feminidad. Un icono del empoderamiento femenino que no dejó de impresionar en la cena gourmet provenzal, luciendo un elegante traje blanco de lino de raya diplomática compuesto por blazer y pantalón palazzo, combinado con zapatos de salón negros y pendientes de brillantes para aportar al look un toque de glamour. Una túnica de lino beige con pantalón y camisa de algodón resultó ser la combinación perfecta de elegancia y comodidad para el itinerario del segundo día. Por último, para el taller floral, eligió un vestido camisero de lino con pantalones acampanados en un delicado verde salvia, consiguiendo un look sofisticado.
Callie Thorpe: la trotamundos shabby chic
Todo empezó con el lanzamiento de su blog en 2012, donde la galesa Callie Thorpe hablaba de su relación con su cuerpo y las dietas. Desde entonces, su plataforma se ha convertido en un espacio para hablar de estilos de vida, confianza en una misma y positividad. Apasionada por todo lo relacionado con viajar, comparte sus vivencias a través de su cuenta de Instagram, repleta de consejos de estilo y moda inspirados en sus experiencias. Para este viaje por la Provenza optó por una estética shabby-chic, caracterizada por vestidos caftán en una variedad de tejidos y motivos orgánicos para llevar de día o de noche si se combinan con los accesorios adecuados. En las calles de Aix-en-Provence se enfundó en un vestido vaquero largo con un precioso escote bordado a ganchillo. Para el taller floral, eligió un vestido de ramio oversize con estampado de flores y amplias mangas kimono. Por último, para la cena lució un refinado y vaporoso vestido largo con motivos bordados y mangas tres cuartos, que combinó con acierto con un bolso de mano y sandalias de pedrería.
Andrea Boutin: toda la feminidad parisina
La modelo francesa Andrea Boutin colabora con varias agencias de moda europeas de prestigio, ha protagonizado campañas publicitarias para reconocidas marcas de belleza y ha desfilado en numerosas pasarelas. En sus redes sociales, Boutin comparte imágenes que reflejan su profesionalidad y estilo, caracterizado por su elegancia y sofisticación. Para la experiencia de la perfumería, lució un sofisticado vestido camisero de doble botonadura con corte trench y cinturón en la cintura para realzar su silueta. Completó su atuendo con un bolso de rafia de ganchillo y bailarinas de lona en tonos neutros para obtener un look totalmente parisino. Para la cena, eligió una túnica de estilo kimono con estampado exótico, perfecta para llevar con una falda de punto abierta durante la noche, o unos pantalones de crepé de alta costura durante el día. Para el taller floral, optó por la comodidad con una túnica roja de gasa de algodón puro y un amplio pantalón de lino blanco.
Rola Blades: modern-chic con una energía contagiosa
Extrovertida y dinámica, Rola Blades posee una personalidad ecléctica que se refleja en sus diversos roles como cantante, madre y creadora de contenido. Nacida en Ghana en 1990, en sus reels de Instagram siempre aparece con una sonrisa radiante, dando consejos de belleza y maternidad o compartiendo instantáneas de sus viajes. Durante su estancia en la Provenza, la vimos con un traje très chic de jacquard blanco con túnica y falda larga acampanada. El collar vintage de strass y los pendientes de araña que lo acompañaban le otorgaban un toque de elegancia y sofisticación. Para el taller floral, eligió un conjunto romántico con vestido camisero de rayas y pinzas en la cintura, combinado con cómodos mules de lazo. Su tercer look, caracterizado por una elegancia sencilla y refinada, consistía en una túnica beis, pantalones de lino a juego, un bolso de rafia y zapatos planos. Una verdadera modernista en todos los sentidos.