A Tomás Navarro, psicólogo y autor de varios libros de éxito, pensar bonito le ayudó no sólo a cambiar su forma de trabajar y triunfar como escritor, sino a salvar la vida de su mujer, como cuenta en Piensa Bonito y en los audios que nos envió desde el Pirineo, donde vive actualmente, para responder a nuestra entrevista.

Como dice de él su biografía, Tomás Navarro es un psicólogo enamorado de las personas y de lo que estas sienten, piensan y hacen. Y se nota escuchándole, además de la franqueza y cercanía que transmite. Navarro tiene una dilatada experiencia internacional como psicólogo, consultor y escritor, trabaja y reside en el Pirineo, y ha publicado con gran éxito internacional las obras Fortaleza emocional, Wabi sabi, Eres más fuerte de lo que crees (éste libro lo escribió durante la pandemia), Yo soy así y Kintsukuroi, que han sido traducidas a más de veinticinco idiomas. Y no nos extraña que sea un autor con tanto éxito, ya que, después de leerle y escucharle, uno tiene la sensación, la certeza incluso, de que no sólo es posible sino fácil, pensar bonito.

cómo pensar bonito
Zenith

Cómo influyen tus pensamientos en tu vida

Con su libro, Tomás Navarro nos acerca a un nuevo estilo de pensamiento más abierto, más creativo y más resiliente para lograr una vida más plena. ¿Sabías que tus pensamientos rigen la relación que tienes contigo mismo y con las personas que te rodean? Es más, tus pensamientos pueden ayudarte a expandir tu vida o, por el contrario, pueden limitarla.

En Piensa bonito, Tomás Navarro nos explica que el secreto para lograr una vida plena consiste en aprender a pensar bien y en saber distinguir los pensamientos racionales de aquellos que nos perjudican y no nos dejan crecer. En este libro, el autor identifica los ocho errores de pensamiento más comunes y revela las claves para pensar bonito, un nuevo estilo de pensamiento más abierto y expansivo, que te invita a explorar tus límites para alcanzar la mejor versión de ti mismo.

Y es que, como recalca Navarro, “pensar bonito es el mejor aliado que tienes para poder vivir la vida según tus deseos y prioridades. Pensar bonito te permite ver oportunidades donde otras personas no pueden verlas. Pensar bonito es armarte de resiliencia para gestionar la adversidad sin sufrir más de lo necesario y ser compasivo con los que te rodean”. Pensar bonito te permitirá pasar de la vida que tienes a la vida que puedes llegar a tener.

Una charla bonita con una persona bonita

Esta es la transcripción de los audios que Tomás Navarro nos envió, desde el Pirineo, en respuesta a nuestra entrevista. Te aseguramos que después de leerla ¡vas a tener muchas ganas de empezar a pensar bonito!

Elle.es: Leyéndote no deja de sorprender que, pese a las dificultades por las que has pasado y que hay en tu vida, consideres que es bonita. ¿Asociamos la felicidad a cosas erróneas? ¿Viene de ahí el sentimiento de insatisfacción que tanta gente tiene?

Tomás Navarro: El problema respecto a la felicidad es que se trata de un estado transitorio y para cada uno tiene un significado diferente. Está muy poco definida, cuesta bastante tener una idea clara de lo que es la felicidad. Mucha gente lo asocia a la excitación cuando en psicología la asociamos más a calma, la serenidad y la tranquilidad. Lo malo es que todo este vacío se llena fácilmente con la publicidad, objetos, situaciones o experiencias que te prometen ser feliz o por lo menos un rato. Pero esto es una felicidad condicionada. Una vez que lo tienes disfrutas, pero luego esa felicidad desaparece y las expectativas no se cumplen. Los coches, la ropa, cosas que son útiles, te proporcionan bienestar, estatus o un momento de alegría. Pero el bienestar de ese momento no es felicidad. Una estrategia que tiene mucha gente para compensar esa falta de calma, ese vacío, es comprar posesiones o experiencias. Pero comprar un objeto es como poner un parche. Y desde la pandemia ya no podemos comprar tantas cosas, se ha reducido nuestro poder adquisitivo. No es que con la pandemia hay desaparecido la felicidad sino que quizá nunca estuvo y lo que teníamos era bienestar. Yo recomendaría revisar la vida que tienes, pensar bonito, vivir una vida con sentido, y probablemente desaparezca parte de ese malestar, esa sensación de vacío.

Elle.es: ¿De verdad cambiar nuestra forma de pensar puede cambiar la percepción de nuestra vida y hacernos sentir más felices?

Tomás Navarro: Sin lugar a dudas. Por ejemplo, ahora que yo tengo que contestar a esta entrevista y que estoy ya en el hotel, duchado y en la cama, puedo pensar dos cosas. La primera algo así como “mierda, ahora tengo que contestar esta entrevista, ya podía haber venido la periodista aquí a hacerla”. Me lo puedo plantear como una tortura, contestar rápido y de mala gana. O puedo pensar “qué bien, la revista Elle se interesa por mi libro y quiere escribir un artículo sobre él”. La aproximación que hacemos es diferente, pasa de ser algo que no me motiva, me genera malestar y me agobia, a algo bien valorado en su justa medida. Hay que ajustar nuestras expectativas y poner en contexto lo que nos pasa para tener una vida mucho más satisfactoria, plena y parecida a lo que es la felicidad.

Cuando tenemos problemas de autoestima y nos sentimos inseguros, podemos hacer una lista de logros

Elle.es: ¿Cómo se aprende a pensar bonito?

T.N.: Leyendo el libro (risas). Fuera bromas, nos puede ayudar por supuesto pero es fácil, se trata de aprender técnicas muy sencillas. Por ejemplo, cuando tenemos problemas de autoestima y nos sentimos inseguros, podemos hacer una lista de logros. Yo la diseñé en una gala muy importante, la de los Premios Planeta, en la que todos eran conocidos menos yo. Fue un momento en el que me sentí muy inseguro. Mi me recordó que mis libros estaban en 100 países, en Italia eran súper ventas, y que se iban a comprar los derechos en EEUU. Me hizo una lista de logros increíble que yo apunte cuando llegué al hotel y desapareció completamente la inseguridad. Otra técnica muy fácil es “la pregunta del millón”. Y es que a veces tenemos pensamientos delirantes: “Como me ha dejado mi pareja, nunca más voy a encontrar el amor”. Es tan sencillo como poner interrogantes: “¿Nunca más voy a encontrar el amor?”. Si te equivocas me tienes que dar un millón de euros. No habrá nadie que diga que no. No hace falta ser muy inteligente para pensar bonito, no es un nuevo tipo de pensamiento sino una manera de aplicar el pensamiento y ponerlo a tu servicio.

Elle.es: ¿Qué es el “ysiísmo” y cuánto tiene que ver con el pensamiento bonito?

T.N.: El “ysiísmo” es una de las primeras técnicas que apliqué para pensar bonito, que me ha acompañado toda la vida y que es mi preferida. Es el “y si” y normalmente la gente lo utiliza en negativo. En 2013, cuando me planteo irme a vivir al Pirineo y ponerme a escribir y cambiar mi manera de trabajar empiezo a pensar “y si no me publica nadie el libro, total, no me conoce nadie”, “no conozco a nadie en el mundo editorial”, “nunca he escrito ningún libro”. Si sigues por ahí llega uno a la conclusión de que es muy poco probable que me vayan a publicar y entonces no merece la pena escribirlo. Lo que pasa es que yo siempre he utilizado el “y si” al revés, “y si sí”: “¿Y si me publican el libro? Será súper guay, acercaré la psicología a mucha gente, daré rienda suelta a lo que me encanta”. Y después del “y si” lo que hago es poner lo que necesito para que ocurra eso. Y también lo utilizo en diagnóstico: “¿Y si no estuviera deprimido?”. El “y si” es fantástico para generar nuevas alternativas que descartamos porque no damos por buenas. Animo a las lectoras de Elle.es a que se apunten al movimiento “ysiísta”.

Elle.es: ¿Cómo pensar bonito cuando has perdido tu trabajo o a un ser querido, o no consigues llegar a fin de mes?

T.N.: Precisamente en esos momentos es cuando más necesitamos pensar bonito. Cuando nos va bien no lo necesitamos porque nuestra vida ya es bonita. Tenemos las cartas que tenemos pero podemos jugarlas mejor o peor. Y en los momentos críticos es cuando sacamos más ventaja si las jugamos mejor. Yo abrí mi centro de psicología en 2009 en plena crisis y fue un éxito. Al cabo de poco tiempo tuve que abrir más despachos porque no daba abasto. Que el momento sea complicado no significa que no puedas hacer nada, significa precisamente que tienes que hacer cosas diferentes a las que hacías, y con cierta diligencia. Desde la pandemia yo, que hacía mis sesiones andando en el Pirineo, esquiando o en bici, las he tenido que hacer online y estoy creando una escuela de psicología online. Podía haberme quedado llorando, quejándome de que con el confinamiento nadie iba a venir al Pirineo y no iba a tener clientes, o adaptarme a una nueva realidad con un pensamiento bonito. Cuando has perdido el trabajo, si no piensas bonito, qué desastre. Si piensas bonito verás la oportunidad de hacer un trabajo nuevo que no habías hecho a esta hora. Una cosa que yo hago con clientes es que hagan candidaturas espontáneas, que apliquen a ofertas. Yo lo he hecho siempre, nadie me ha venido a buscar para darme trabajo. Con el libro me fui a una librería y vi las editoriales de los libros como el que yo quería publicar, las busqué en internet, les mandé un correo… También yo estuve a punto de perder a mi ser querido y precisamente se salvó por pensar bonito. Podría haberme puesto a llorar o gritar y nada de eso me hubiera ayudado. Como cuento al principio del libro, reanimé a mi mujer con un masaje de reanimación cardiovascular. ¿Cuando no puedes llegar a final de mes? Tal vez puedes vender parte de lo que tienes en Wallapop, buscar una nueva área de negocio, ahorrar de otra manera… Sin pensar bonito poca cosa vas a conseguir, te vas a quedar anclado en la queja, el victimismo, o en el “qué desagracia”. Pensar bonito es enfocarte en una solución. Cuando te enfocas en el problema el pensamiento se atasca y ve todo lo que no puedo hacer.

Tenemos las cartas que tenemos pero podemos jugarlas mejor o peor.

Elle.es: ¿Crees que la pandemia nos ha dejado una especie de trauma colectivo? ¿Cambiando nuestro pensamiento podemos llevarlo mejor?

T.N.: Te pongo ejemplos sobre cómo pensar bonito que conté en las entrevistas que me hicieron durante la pandemia. Durante esta época también escribí el ebook 'Eres más fuerte de lo que crees'. Es una situación complicada, pero pensando bonito, no nos piden un riñón, no tenemos que enviar a nuestros hijos a la guerra, podíamos estar en casa con wifi, viendo películas, series, tenemos comodidades aunque nuestras casas sean pequeñas. No nos han quitado el 10% de nuestros ahorros, no hemos tenido que dejarlo todo e irnos a Suiza o Alemania como tuvieron que hacer nuestros abuelos. Sí que nos ha cogido en mal momento pero hay que ponerlo en contexto. Por otra parte, la pandemia sugiere una serie de oportunidades. Por ejemplo, tengo clientes que eran preparadores físicos que se han pasado al mundo digital e incluso facturan más porque ahora llegan a gente de muchos otros países. ¿Cuántos esfuerzos tuvieron que hacer nuestros abuelos para ganarse la vida? Las crisis son repetitivas, son ciclos, y dentro de lo que cabe esta no es tan exigente. Pensando bonito, durante el encierro podías aprender cosas nuevas. Pensando bonito puedes enfocarte en ser resiliente, en sacar partido de lo que hay. Pensar bonito te va a permitir ir más allá en momento delicados.

¡Gracias por ayudaros a pensar bonito Tomás¡

Los 8 errores de pensamiento según Tomás Navarro

  1. Piensas demasiado rápido.
  2. Piensas superficialmente.
  3. No confías ni en ti ni en tus posibilidades.
  4. Das importancia a lo que es irrelevante.
  5. Limitas tus alternativas.
  6. Crees todo lo que piensas.
  7. Sacas conclusiones y tomas decisiones cuando no estás bien.
  8. Generalizas.