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Winona Ryder y Keanu Reeves han compartido pantalla en cuatro películas, lo que les ha convertido en buenos compañeros de profesión y sobre todo grandes amigos. Ambos hablan maravillas el uno del otro y se nota el cariño inocente que ambos se guardan desde su primer encuentro, y es que hay veces que la conexión se intuye tras la pantalla pero nada nos gusta más que nos lo confirman los propios actores.
Fue en 1992 cuando Ryder y Reeves trabajaron juntos por primera vez en ‘Drácula de Bram Stoker’ bajo la dirección de Francis Ford Coppola. Y desde este encuentro, ambos se dieron cuenta de que tenían más cosas en común de las que pensaban, compartían profesión, la forma de ver la vida y aparentemente la intención de seguir conservando su relación.
En 2006 volvieron a coincidir en ‘Una mirada a la oscuridad’, en la que él interpretaba a un agente encubierto contratado para controlar una epidemia de droga, empezando por espiar a sus propios amigos, entre los que se encuentra el personaje de Winona Ryder. Más tarde volvieron a coincidir en 'La vida privada de Pippa Lee’, en 2009, donde cuentan una historia de vidas aparentemente normales que ocultan conflictos internos.
Winona Ryder y Keanu Reeves: Del drama al amor, sin salirse del guion
Después de rodar su última película juntos en 2018, ‘La boda de mi ex’, el cariño entre ambos seguía intacto, según reconocía Winona: “Él es una de mis personas favoritas, para trabajar y para tener alrededor”. Mientras que él también le llenaba de elogios: “Es una gran amiga, tiene un gran sentido del humor, un bonito corazón y un bonito espíritu”.
En esta película, dirigida por Victor Levin, se dejaron llevar en una comedia romántica en la que interpretaban a dos personajes antipáticos y asqueados de la vida que terminan enamorándose. Aunque la trama es predecible, la química entre ambos da forma a una película que la convierte en una historia ligera y divertida.
Un matrimonio longevo
Y parece que la química entre ellos no solo se limita a lo amistoso, sino que ambos han reconocido que cuando se conocieron sintieron algo: "Ambos sentimos un flechazo platónico", según cuentan en una entrevista para ‘Entertainment Tonight’. Aunque reconocen que fue algo inocente y que parece que no se convirtió en algo amoroso, está claro que la admiración entre ambos es mucha y por eso funcionan tan bien juntos.
Eso sí, aunque después de tantos años ambos no se hayan dado una oportunidad para llevar esta relación adelante en el plano amoroso, hay una anécdota que los une para siempre, ya que según han contado en alguna ocasión en su primera película juntos, Coppola llevó a cabo la escena de una boda con un cura de verdad. "Hicimos una toma completa de una ceremonia de matrimonio con sacerdotes de verdad. Winona dice que sí, Coppola dice que sí, así que supongo que nos casamos ante los ojos de Dios", admitió después Reeves en una entrevista con ‘Esquire’.
Una anécdota que ambos han tomado con humor, pero que suma otro capítulo a una historia marcada por la complicidad, el cariño y una amistad que, ha demostrado ser duradera. Más que una conexión, lo suyo es una relación que ha resistido el paso del tiempo... y que, podría contar incluso como uno de los matrimonios más longevos (y curiosos) de Hollywood.
Licenciada en Periodismo y Humanidades en la Universidad Carlos III de Madrid, con experiencia en prensa escrita en distintos medios digitales, y especializada en marketing y comunicación. Le interesan las historias, ya sea en papel, en pantalla o en una buena conversación. Siempre tiene un libro a mano, una película pendiente y una playlist en reproducción.
