Jessica Chastain: "No voy a silenciar lo que pienso solamente por proteger mi carrera"

Ser mujer, para Jessica Chastain (Sacramento, California, 1977), es una contradicción hermosa, una lucha constante por encontrar un equilibrio entre ser vista y ser escuchada, entre mostrar vulnerabilidad y al mismo tiempo desbordar fortaleza. En su trabajo no hay lugar para la sumisión; hay una reclamación constante de su espacio, de su verdad. Y sin embargo, detrás de esa fuerza, existe una humanidad profunda, un deseo de no perder nunca lo esencial: ser fiel a sí misma. No busca el aplauso fácil ni la perfección esperada. Busca la honestidad, la complejidad que conlleva ser mujer en una industria que muchas veces se empeña en despojarlas de su autenticidad. Creció rodeada de dificultades, pero en su mirada siempre había algo más: una determinación feroz, una certeza de que podría reescribir las reglas del juego. «No quiero ser la damisela en apuros», dice. A la embajadora global de Damiani no le gusta que le vengan con cuentos de mujeres débiles. Las suyas son intrépidas, inteligentes y muy capaces de resolver las situaciones más complejas a las que se puede enfrentar un ser humano. Piensa en Murph, la brillante hija de Matthew McConaughey en Interstellar. O en la aguerrida agente de la CIA tras la pista de Bin Laden en La noche más oscura. Pero es que también domina el otro lado del espejo, la maldad, el egoísmo en estado puro o la manipulación con principios de sus personajes en La cumbre escarlata, El año más violento y El caso Sloane. A esta lista de papeles hay que añadir ahora la de una mujer que se infiltra en grupos de odio online para detener ataques públicos a gran escala en la serie The Savant (AppleTV+), y una filántropa millonaria y clasista en Dreams. Mientras, combate desde hace años contra la desigualdad de salarios y de personajes por el género que rige en el gremio y nunca se ha autocensurado al hablar de abusos, patriarcado o cualquier injusticia que pudra la sociedad. En cada gesto y palabra, hay un propósito. Porque Jessica Chastain no está aquí solamente para brillar. Está para cambiar la historia.

Vestido lencero y sandalias de metacrilato con plataforma de madera de Chloé y collar en oro blanco y diamantes, colgante en oro amarillo, diamantes y cuarzo citrino, pulsera y anillos en oro blanco y diamantes todo de la colección ‘Margherita’ de Damiani.

¿Cuál es el secreto de tu prolífica carrera?

Pienso que todo tiene que ver con el equilibrio. Si siento demasiada positividad, creo que algo negativo va a pasar pronto. Por eso no me gusta celebrar mucho. A lo bueno le sigue lo malo y viceversa. Para mí, lo único importante es aprender una nueva lección con cada papel. No estoy en la industria por la fama. No soy alguien que busque llamar la atención, todo lo contrario. Y ese aspecto, estoy segura, ayuda a tener una vida más privada, más normal.

Acabas de presentar la película Dreams. ¿Llega en el momento idóneo, cuando se están tomando duras medidas políticas contra los inmigrantes indocumentados en tu país?

Sí, es innegablemente política. El director Michel Franco tiene el don de provocar reflexión y debate con cada uno de sus trabajos. Aquí profundiza en la compleja relación entre Estados Unidos y México. No me voy a rendir con respecto a mi país, y quiero señalar que muchos de nosotros seguimos teniendo esperanza y luchamos por una causa justa. Si observas la Estatua de la Libertad y cómo se forjó esta nación, es evidente que ha abrazado a los inmigrantes.

¿Existe un deseo reivindicativo en tu cine?

Considero que todo lo que hago en mi vida es feminista. Algo muy importante, especialmente en el momento político que vivimos. Me encanta interpretar a mujeres que cometen errores, que toman decisiones complicadas. Pero siempre las apoyo y las comprendo, porque son seres humanos. No quiero representar a un personaje que sea sólo una idea de la perfección femenina, porque eso no existe, salvo en la mitología o en sociedades sexistas donde a las mujeres no se les permite ser humanas. Y para mostrar la humanidad, también hay que ahondar en la oscuridad de lo que uno es. Ese es mi sello. Nunca me enfadaré con una mujer por tener que hacer lo que sea necesario para mantenerse y sobrevivir, porque ella está jugando con reglas diferentes a las de los hombres.

Maxigabardina, camiseta de tirantes y pantalón vaquero, todo de Gucci, collar y anillo, ambos en oro blanco, diamantes, diamantes marrones y amarillos de la colección ‘Mimosa’ de Alta Joyería de Damiani y anillo en oro blanco y diamantes de la colección ‘Mimosa Flexi’ de Damiani.

¿Por eso fundaste tu productora Freckle Films?

Siempre me han dicho que soy la abogada de pleitos pobres. Con este proyecto deseo apoyar a las mujeres, ofrecerles un mayor abanico de posibilidades y que un día sean actrices, productoras, escritoras o estén al frente de un estudio. Que contemos con una mayor diversidad en nuestras historias en lugar de relatar las narraciones de unos pocos. Y hablo de todas las mujeres, transexuales o cualquiera que sea tu preferencia.

¿Cómo de importante es crear modelos femeninos distintos para las nuevas generaciones?

Siempre lo ha sido. Las jóvenes que están formándose en este mismo momento creen, con total lógica, que tienen los mismos derechos y responsabilidades que los chicos. Sin embargo, a medida que crezcan, la sociedad comenzará a enseñarles un cuento diferente, uno que ya hemos vivido nosotras, las de mi generación. Esas chicas necesitan ver modelos en los medios de mujeres que sean profesionales exitosas, ambiciosas, preparadas y, sobre todo, complejas. Mujeres que demuestren que su valor no depende exclusivamente de lo que se ve en el exterior, sino de lo que llevan dentro. Estos ejemplos son esenciales para inspirarlas, para que crean que lo que quieren lograr es posible y que ser ellas mismas es su mayor fortaleza.

Blusón de Loro Piana y collar en oro rosa y diamantes de la colección ‘Belle Époque’ de Alta Joyería de Damiani.

Bueno, vivimos en una sociedad que a menudo valora a las mujeres sólo por su juventud y apariencia externa...

Cuando se les transmite esto, les estamos diciendo, de forma implícita, que eso es lo único que vale. Resulta crucial que les digamos que la sabiduría, la inteligencia, la amabilidad, el liderazgo y la forma en que se presentan al mundo son los elementos que marcan la diferencia. Eso es lo que debe brillar. Que dejen de lado la presión de agradar a los demás. Que cada día hagan algo que les recuerde quiénes son. Que no esperen que otros las validen. Que se atrevan a asumir riesgos. Que no se desgasten buscando la aprobación de todos, porque si lo hacen, se estarán sacrificando, ya sea por un compañero o por cualquier otra cosa. Cuando una mujer tiene ambición, de inmediato, se la etiqueta como difícil, y eso debe cambiar. Tenemos que aprender a exigir lo que nos corresponde. A veces, la culpa recae sobre nosotras por no saber cómo hacernos oír y reclamar lo que es nuestro por derecho.

¿Cómo luchas tú contra las inseguridades?

Es muy normal tenerlas y no me puedo deshacer de ellas porque una actriz tiene que ser vulnerable. Así que, simplemente, las acepto, aunque no permito que me controlen. Asumo que soy una persona tímida. Pero trato de concentrarme en mis cualidades. Sobre todo, en las que no tienen nada que ver con mi físico porque esas, antes o después, desaparecen.

Jersey de cuello alto y falda de algodón de Michael Kors y pendientes y anillos en oro blanco y diamantes y colgante en oro amarillo, diamantes y cuarzo citrino todo de la colección ‘Margherita’ de Damiani.

Antes hablabas de que todo lo que haces en tu vida está inspirado por el feminismo. ¿Siempre ha sido así?

Creo que, sin ser plenamente consciente de ello, siempre ha estado presente en mi vida. Y puede que se deba a mi infancia: por ser criada por madres solteras, por vivir situaciones extremas donde a menudo no teníamos ni para comer o nos enfrentábamos al desahucio. Recuerdo la sensación de ser invisible, de sentir que la sociedad no nos veía, como si nuestras vidas no importaran. No podía aceptar cómo trataban a mi abuela, las cargas y las responsabilidades que se le imponían sin que nadie la reconociera. La desigualdad estaba en todas partes: en los salarios, en las oportunidades, en la educación, en el acceso al trabajo. Desde muy joven me enseñaron que eso no era justo, y esa idea caló tan profundo en mí que se convirtió en parte de lo que soy. Cuando veo una forma de discriminación, no puedo quedarme callada. Mi voz sale, no lo puedo evitar. Es lo que me impulsa, y será una parte integral de mi trabajo.

Top drapeado sobre cisne de gasa transparente de Cortana y pendientes y collar en oro blanco y diamantes de las colecciones ‘Mimosa’ y ‘Mimosa Flexi’ de Damiani.

¿Cuánto peso tienen las mujeres de tu vida?

Han sido fundamentales para mi crecimiento, para convertirme en quien soy hoy. Cada una de ellas, con su fuerza, su sabiduría y su amor, ha dejado una huella que ha marcado mi camino. Y aunque esto es algo muy personal para mí, siento que no es una experiencia exclusiva. De alguna manera, le sucede a muchas personas, ¿no? De hecho, recuerdo haber oído que, en los momentos previos a la muerte, la palabra que más se escucha, independientemente del género de quien está marchándose, es mamá. Esa es una verdad tan profunda que no la podemos ignorar. Y refleja el poder inmenso que las mujeres tienen en nuestras vidas, un poder tan primario y tan significativo que, incluso en nuestro último aliento, el pensamiento más cercano, el que surge de lo más profundo de nuestro ser, es llamar a nuestra madre.

¿Cómo amplificas la voz de quienes no la tienen?

Todos somos ciudadanos y la Primera Enmienda, hasta el momento, garantiza la libertad de expresión. Es importante que todos hablemos cuando veamos una injusticia. Es irresponsable ignorar, acosar, abusar o silenciar a alguien. No quiero vivir en un mundo donde eso sea aceptable. Puedes hablar de algo, puedes querer que mejore. Pero llega un punto en el que tienes que preguntarte: «¿Qué puedo hacer realmente para cambiar la conversación?». Para mí, se trata de actuar. En cualquier caso, no puedo callarme lo que pienso sólo por proteger mi carrera. Sería egoísta, y no puedo permitírmelo. Yo dispongo de acceso a atención sanitaria, tengo derechos y estoy respaldada. Muchos no gozan de esa suerte, y es natural preocuparme por ellos, por sus derechos y su bienestar.

Minivestido de Carolina Herrera New York y pendientes en oro blanco y diamantes de la colección ‘Mimosa’ y anillos y pulseras en oro blanco y diamantes, ambas de la colección ‘Mimosa Flexi’ de Damiani.

Nunca se ha hablado tanto de la igualdad de género. ¿La situación ha mejorado?

He observado un cambio significativo en los últimos diez años. Pero el verdadero cambio llegará el día en que dejemos de darnos palmadas en la espalda por la cantidad de mujeres que tenemos en la industria o por la cantidad de películas protagonizadas por personas negras que se estrenan. Ese será el momento en que la industria habrá cambiado de verdad. Las historias son el alma de nuestra cultura y de nuestra sociedad. Cuando crecí, siempre veía a las mujeres sacrificándose por el bienestar de los demás y, como te decía antes, esa lección no creo que sea la que debemos seguir transmitiendo. Ni tampoco los hombres deben hacerlo. En los últimos tiempos me he cuestionado: «¿Qué estoy eligiendo? ¿Estoy mostrando a las mujeres de una manera diferente a lo que ya hemos visto?». Al principio lo hacía pensando en las niñas, pero luego entendí que es igual de importante para los niños. Porque los hombres también tiene que sentirse cómodos viendo a mujeres en estos roles. Si no lo hacemos, les estamos negando la oportunidad de entender que lo femenino también es poderoso, fuerte y valioso.

‘Blazer’ y ‘crop top’ de Max Mara y pendientes, collar y anillos, todos en oro rosa, diamantes y diamantes marrones de la colección ‘Mimosa Flexi’ de Damiani.

¿Cómo los hombres están aceptando no solo eso, sino también su propia vulnerabilidad masculina?

Ellos también sufren la presión de otros hombres cuando intentan mostrar sus emociones o llorar. En Estados Unidos la tasa más alta de suicidios se da entre ellos. La idea de que expresar sus sentimientos los hace menos fuertes es una creencia peligrosa. Enseñarlos es un acto de valentía, no de debilidad. Para combatir esto, necesitamos romper con los estereotipos que definen lo que significa ser hombre, creando espacios donde la vulnerabilidad sea vista como una fortaleza y no como una amenaza. Igual de nociva es la suposición de que las mujeres carecen de fortaleza. Por ello, es esencial que los personajes no se queden atrapados en los estereotipos que limitan la forma en que su género ha sido históricamente representado.

¿Actuar es duro para ti?

Me cuesta a nivel emocional. Por eso intento tomar descansos entre un rodaje y otro para recuperarme, aunque no siempre lo consigo.

Traje pantalón de Emporio Armani y salones de Jimmy Choo y collares de cruz en oro blanco, diamantes y uno de ellos con zafiros de la colección ‘Belle Époque’ de Damiani.

En The Savant interpretas a una mujer que se infiltra en grupos de odio online para detectar posibles ataques coordinados. ¿Cómo te preparas para este papel?

Me metí en la piel de una periodista de Cosmopolitan que se coló en estos foros virtuales para analizar la violencia de hombres adultos. No tuve que investigar demasiado para encontrar las cosas horribles que dice la gente. Basta con abrir Twitter y ahí están: comentarios sexistas, misóginos, racistas y antisemitas. Creo que las redes pueden convertirse en un pozo negro de negatividad, acoso anónimo y odio. Así que no tuve que hacer mucho para sumergirme en ese mundo.

¿Cómo enfrentar de forma efectiva el creciente impacto de la incitación al odio y la radicalización en Internet?

Ojalá tuviera una respuesta clara. Vivimos en un momento muy complejo a nivel mundial. Hay muchas personas que están luchando. Y entiendo lo que es encontrarse en una situación difícil, especialmente cuando se trata de problemas financieros, de hogar o de supervivencia. Sé lo que es. A veces, cuando te falta lo esencial, como comida o vivienda, puede ser más difícil sentir empatía por los demás, porque llevas contigo esa frustración y rabia. Parece que estamos viviendo en ese punto ahora mismo, y espero que podamos superar esta etapa, porque no es un buen lugar para la humanidad.

Maxivestido de gasa de Loewe y anillo y pendientes en oro blanco y diamantes de la colección ‘Margherita’ de Alta Joyería de Damiani.

¿Qué cambió el rumbo de tu vida?

Descubrir a Shakespeare a los 15 años.

¿Sigues algún ritual?

Solo a la hora de volar. tengo que tocar el exterior del avión y poner los dos pies a la vez en la puerta cuando entro. Así me siento segura aunque sé que es algo complicado de explicar a las azafatas de vuelo.

Eres la embajadora global de Damiani. ¿Qué te atrajo de esta firma italiana de Alta Joyería?

Para mí, es un honor formar parte de una familia que, con tanto esmero, cuida y transmite la esencia artesanal de Italia alrededor del mundo. Cien años de historia, pasión y creatividad forman un legado invaluable que debe ser preservado. Siempre he tenido una fascinación especial por las gemas y las joyas. Hay algo casi mágico en ellas, un poder emocional que va más allá de su belleza. A lo largo de mi vida, me han atraído ciertas piedras y colores, aquellos que, de alguna manera, se alinean con lo que siento en cada momento.

Maxijersey de lana de Gabriela Hearst, pantalón vaquero de Levi’s y pendientes en oro rosa y diamantes de la colección ‘Belle Époque’ de Alta Joyería, y anillos y pulseras en oro amarillo, rosa y blanco, con y sin diamantes, de la colección ‘Belle Époque Reel’ de Damiani.

Una curiosidad, ¿cómo es la Jessica de a pie?

Disfruto pasando el tiempo libre con mi familia y mis amigos; voy al cine, al teatro o al ballet. Soy una loca con los animales, ¡los adoptaría a todos! Me gusta cocinar, caminar y sentarme en silencio. Algunos obtienen energía de las multitudes. Tal vez porque soy muy sensible, siento que cuando estoy con mucha gente la mía se va. Creo que esa es la diferencia entre introvertidos y extrovertidos. Yo necesito estar en silencio por un rato. También hay quienes necesitan ser devorados por su profesión y por las experiencias intelectuales. No es mi caso, aunque disfruto muchísimo haciendo mi trabajo.

¿Qué te entusiasma más del futuro?

Que coexistamos en espacios compartidos. Que dejemos a un lado la vida virtual y que volvamos a ser parte de una comunidad. Que seamos de nuevo humanos, vivamos en pausa y nos miremos a los ojos.

Claudia Saiz Puig

Claudia Saiz Puig es Jefa de Actualidad de ELLE y Coordinadora ELLE Kids.