'The Politician': la gran tesis de Netflix sobre la ambición política

'The Politician' es la primera gran apuesta internacional del otoño para Netflix: en esta producción la cadena de streaming ha puesto toda la carne en el asador, sabiendo que detrás de ella está Ryan Murphy, uno de los grandes guionistas y 'showrunners' de Hollywood. Entrar en su página del IMDb y revisar su trayectoria es hablar de éxitos y de calidad. Es el responsable de títulos como 'Nip/Tuck, a golpe de bisturí', 'Feud', 'American Horror Story' o 'El asesinato de Gianni Versace' , algunas de las mejores producciones televisivas de los últimos años.

En 'The Politician', Murphy está acompañado por dos viejos conocidos, Ian Brennan y Brian Falchuk, con los que ha creado otras dos importantes series como 'Pose' –por la que Billy Porter se alzó con el Emmy al Mejor actor de drama– y 'Glee', una revolucionaria serie ¿adolescente? ¿juvenil? que estuvo en nuestras pantallas entre 2009 y 20015.

En los ocho episodios de los que consta 'The Politician', vas a notar varias reminiscencias a 'Glee', y no solo porque el protagonista, un Ben Platt recién llegado de Broadway dando vida a Payton Howard, de vez en cuando sorprenda interpretando una canción –quizás la nueva serie de Netflix habría sido un buen musical–.

El protagonista es un joven adolescente con una palabra constante en la boca: "ambición". Según la sinopsis oficial, "Payton Hobart, un estudiante adinerado de Santa Bárbara, California, ha sabido desde los siete años que sería presidente de los Estados Unidos. Pero antes tendrá que aprender a manejar el panorama político más traicionero de todos: la escuela secundaria de Saint Sebastian.

Para lograr ser elegido Presidente del Consejo Estudiantil, asegurarse un puesto en Harvard y mantenerse en su particular camino hacia el éxito, Payton tendrá que ser más astuto que sus despiadados compañeros de clase sin sacrificar su propia moralidad ni su imagen".

La serie está llena de chascarrillos y momentos brillantes en el guión que reconocerán los seguidores de Murphy, además de personajes bien definidos gracias a un gran reparto: no hay que perder de vista a Gwyneth Paltrow, Lucy Boynton, Zoey Deutch y Laura Dreyfuss, ni tampoco a magníficos veteranos como Dylan McDermott, Jessica Lange o Bette Midler.

Paltrow da vida a la madre de Payon, que también tiene dos gemelos a los que no atiende demasiado. La novia de Payon es Alice (Julia Schlaepfer), que ya piensa en ser primera dama, y el protagonista cuenta ya con dos consejeros políticos: James (Theo Germaine) y McAffe (Laura Dreyfuss). Jessica Lange es la abuela de la compañera política del protagonista, a la que da vida Zoey Deutch, mientras que Lucy Boynton se pone en la piel de la enemiga del candidato, Astrid, muy apoyada por sus padres Dylan McDermott y January Jones.

La reflexión que aborda Murphy en esta serie es de lo más interesante: ¿qué necesitamos para ser alguien en el mundo de la política? Y es un pensamiento que desarrolla de manera ácida, oscura y satírica, muy al gusto de su forma de ser y escribir, algo que se agradece a lo largo de todo el desarrollo de la serie.

Sin embargo, hay un sentimiento contradictorio que han expresado las primeras críticas, porque a pesar de que, según han comentado medios como 'Variety', 'Hollywood Reporter' o 'Rolling Stone', la producción adolece de falta de ritmo y, para lo que se espera de una series de Murphy, se queda con una calidad algo menor.

'The Politician' empieza siendo una intriga adolescente de instituto, pero no se queda ahí; se complica terriblemente. Y aunque la ambición sea el eje en torno al que gira, se tratan muchos otros temas, desde la depresión hasta las relaciones familiares, pasando por las armas de fuego, la crisis de los cuarenta, el clasismo o el aburrimiento de las clases políticas.

¿Habría ganado 'The Politician' queriendo ser, redundando en el tema, menos ambiciosa? Muchos se preguntan si con menos capítulos habría mejorado a centrar el argumento en lo meramente político, dejando de lado temas secundarios, porque en los chistes y en las intrigas políticas es realmente donde la serie da el do de pecho.

La idea de 'The Politician' es que la serie vaya dedicando cada una de las temporadas al ascenso de Peyton en su carrera política, por eso te deja con ganas de más y sabiendo que los siguientes capítulos probablemente sean mejor, dejando de lado el exceso de momentos adolescentes y apostando por las intrigas y por ahondar en el análisis sarcástico e irónico del poder, que es donde realmente brilla Murphy. Esperamos con ansiedad la segunda temporada.

Puntos ELLE: 6,5

Begoña Alonso

Begoña Alonso es experta en ocio, cultura y estilo de vida, coordinando la sección de Living en Elle.es desde hace más de seis años. Llevar la sección de Living supone que lo mismo escribe un reportaje sobre las mejores series de terror de Netflix, que un artículo de viajes y lunas de miel, un perfil de una activista feminista o un listado de los mejores libros de la historia que tienes que leer. 

Siempre suele decir que la vida no le da para todo: libros, agenda, música, ocio, cine, series, plataformas de streaming (Netflix, Amazon, HBO, Disney+, Filmin, Movistar+, Apple TV+…), maternidad, televisión, feminismo, viajes, cultura, ‘lifestyle’, motor, tecnología… Pero es capaz de llegar a todas partes para ofrecer siempre los contenidos más actuales e interesantes. 

Begoña Alonso se licenció en 1999 en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, pero cuenta casi con 30 años de experiencia en la profesión. Se estrenó en medios locales como Huelva Información o Las Provincias, pasó por radios vecinales haciendo programas de cine y luego aterrizó en el mundo del papel, en medios como La Razón, Maxim o Reporter. 

Tras 9 años dedicada al ‘branded content’, Begoña lleva una década en ELLE, el mismo tiempo que ha transcurrido desde que consiguiera el Premio 20 Blogs por ‘The Best of the 80s’, un blog de música de los 80, una de sus pasiones. También adora las películas de boda y se pasa más tiempo planificando viajes que llevándolos a cabo, pero eso es otra historia.