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Abrió en el barrio de Chueca en febrero de 2020 y pocas semanas de apertura le bastaron para llamar la atención de los espíritus 'foodies' que anhelan lo cañí sobre la mesa. Aunque tuvo que cerrar sus puertas durante los meses de pandemia y reinventarse para poder sobrevivir a la incertidumbre, Casa Orellana resurgió cual ave Fénix, convirtiéndose en una de las tabernas castizas más afamadas de Madrid. Tres años después, llegó la apertura de una segunda sede y un cambio de chef. Pero Casa Orellana sigue manteniendo su autenticidad, colocando el producto español bien elaborado en el centro de su recetario.
Buen hacer, sencillez, calidad. Sin más pretensiones que disfrutar de la comida en todo su esplendor. Bajo esta máxima, su carta invita a tomar un picoteo o sentarse a comer durante horas, saboreando platos tan legendarios como las croquetas de rabo de toro, la ensaladilla rusa, unas fantásticas alubias de Tolosa o los irrepetibles huevos rotos con carabineros.
Desde que el restorán se sumara a los desayunos tardíos, son muchos los madrileños que no se pierden esta cita semanal para disfrutar de un ‘brunch’ en el que reinan los productos ibéricos. Ahora, el cocinero ha querido ahondar en sus raíces más aún, añadiéndole el acento andaluz a un lenguaje ya de sobra conocido (y adorado): una propuesta que mantiene la tradición y se inspira en la cocina del sur con el clásico mollete andaluz como protagonista.
El menú brunch está compuesto por dos pasos, ambos con opciones para todos los gustos. Mientras que en el primer pase se podrán degustar los típicos panecitos de Antequera, a elegir entre el mollete de paletilla ibérica de cebo con tomate, ajo y aceite, el benedicto con salmón, el mollete club con mayonesa kimchi, burrata, huevo, bacon, rúcula y tomate o el de huevos rotos con bacon y salsa holandesa, el segundo pase es perfecto para los amantes incondicionales del brunch mediterráneo: hamburguesa con patatas fritas con 100% carne de vacuno, queso, lechuga y tomate, la ensalada césar con pollo al carbón, el yogur con frutas, muesli y miel, las tortitas con fruta, nata y sirope de arce o Nutella y la torrija salteada al toffee con helado de turrón. Para acompañar, el menú incluye un zumo natural con café o té a elegir y mini bollería.
Esta versión de 'brunch' a la española, al igual que ocurre con casi todos los platos de Casa Orellana, invita a mojar pan. Así que si quieres darte un homenaje de fin de semana sin renunciar a las buenas costumbres, date un capricho cualquier sábado o domingo. De 11:00 a 13:00h tienen disponible este irresistible menú por 26 € y es perfecto para alegrarse el día.
Dirección: Orellana, 6 (Salesas, Madrid) // Plaza de la República del Ecuador, 2 (Chamartín, Madrid).
Teléfono: 915 024 182 (Salesas) // 917 37 37 36 (Chamartín).
Precio medio picoteo: 15 €.
Precio medio comida: 25 €.
Lucía Ruiz estudió Relaciones Internacionales y Comunicación y ahora continúa formándose con un Máster de Marketing de Moda. Escribe para aterrizar, para recordar, para existir. Es su manera de dar forma a la vida, de hacerla real. Por eso anota todo aquello que le hace feliz: la comida, los viajes y las nuevas experiencias no pueden faltar en la lista.