Esta receta es perfecta para servir en las eternas noches de verano, como tentempié para acompañar una cervecita al sol o simplemente para agregarle diversión al plato principal.

Para realzar aún más el sabor de los langostinos, te recomendamos maridarlos con un vino blanco seco y fresco, como un Albariño o un Verdejo (este, por ejemplo), cuyas notas cítricas y afrutadas armonizan perfectamente con el toque exótico del coco y el panko. Si prefieres una opción más burbujeante, un espumoso bien frío es la opción ideal, pues refresca el paladar y potencia los matices del marisco.

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Lucía Ruiz estudió Relaciones Internacionales y Comunicación y ahora continúa formándose con un Máster de Marketing de Moda. Escribe para aterrizar, para recordar, para existir. Es su manera de dar forma a la vida, de hacerla real. Por eso anota todo aquello que le hace feliz: la comida, los viajes y las nuevas experiencias no pueden faltar en la lista.