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No paramos de sacarnos ases de debajo de la manga para tener buena cara. Parece algo imposible en invierno por culpa de la falta de sol, el estrés de la rutina y la falta de horas de sueño que la caracteriza. Todos los trucos suelen tener relación con el colorete o con productos que elevan el tono de la piel en general. Hace unos días descubríamos las gotas autobronceadoras que se mezclaban con la crema y hoy el bronceador que está revolucionando el mercado.
Es el nuevo Soft Pinch Liquid Contour de Rare Beauty. Comparte nombre con los coloretes tan famosos de la marca porque funciona exactamente como ellos. Se trata de un bronceador líquido que se aplica por puntos para marcar los contornos del rostro y definir las facciones, además de elevar el tono y mejorar mucho el aspecto de la piel y, en definitiva, el aspecto saludable de la cara.
El bronceador efecto buena cara fácil de usar
Los formatos líquidos para productos que antes, sobre todo, se veían en polvo son tendencia. Pero es cierto que no para todas resultan fáciles de usar. Además, pigmentan mucho, en especial los de Rare Beauty, por lo que el miedo se apodera de nosotras cuando llega el momento de aplicarlo y decidir dónde, cómo y cuánto poner.
Pero este bronceador ha llegado para disipar todos nuestros temores. No pigmenta tanto como los coloretes, por lo que es mucho más sencillo controlar el color y su intensidad. La razón es que se busca que su aspecto en el rostro sea muy natural, que no se note que hay un producto de tono marrón que ha marcado los ángulos y relieves de las facciones.
Aún así, sólo con dos gotas en cada mejilla (justo debajo del pómulo) y dos en la frente, cerca de la raíz del cabello será suficiente. Al menos, para conseguir mejorar el tono de la piel y conseguir tener buena cara. Puedes añadir también un punto y dos líneas finas en el tabique con el final del producto en el aplicador para afinar la nariz.
Uno de los conflictos que hay con los bronceadores líquidos es que se nota que se ha puesto un producto que no se ha aplicado correctamente si te pasas de cantidad o no lo repartes bien. Pero este tampoco deja manchas ni desigualdades de tono, ni es difícil de difuminar porque su textura es ultraligera.
Se funde súper fácil con la piel y se unifica de forma muy orgánica con el tono natural. Queda muy uniforme. O sea, como si ese tono algo más bronceado de algunas zonas fuera obra del sol. Las partes donde no se ha aplicado el bronceador serán más claras, sí, pero es lo que se busca. Ese contraste iluminará el rostro, no se verá como dos zonas diferenciadas. El resultado es un efecto sombreado y bronceado lleno de luz.
Un truco de aplicación
Si quieres que el resultado sea mucho más natural, además de difuminarlo con una brocha plana y amplia, que te ayude a marcar los contornos, puedes aplicar el bronceador antes del maquillaje. Así, el tono se mejorará "desde dentro" de una manera muy sutil y el bronceado será aún más uniforme. Parecerá que no llevas nada, nadie sabrá donde está el truco.